8 de diciembre de 2007

LA IZQUIERDA Y SUS TIRANOS

Pocos países pueden jactarse de tener –con tanto cinismo- su fe y fortaleza política en un sistema partidocrático que, a todas luces, funciona de manera tan miserable como en México. Déjeme explicarle.

Mientras el oficialismo elige un candidato que se sabía ganador desde antes de anunciar su candidatura misma, el PRD vive uno de los momentos más extraños en su historia. Esta propuesta navarretista de fusionar a PRD, PT y Convergencia en un solo partido que “represente los intereses de la izquierda mexicana” y tenga, principalmente, una lista de candidatos única y un liderazgo reconocido en la figura del pejezoide criminal, representa el primer paso del lopezobradorismo para la escisión tras ver el riesgo latente de perder la elección del próximo año y en la que preparan el terreno para la discordia con un Gerardo Fernández La Roña que demuestra el minimalismo ideológico de un partido que, desafortunadamente, sigue a las órdenes de su mesías región 4, pues sólo así se entiende que desde las oficinas del CEN del PRD se busque agredir y deslegitimar a un candidato a la dirigencia sólo por no ser parte de una tribu que adora su tótem tabasqueño. Ya estamos acostumbrados a la basura que cada elección perfuma los resultados internos del PRD con el hedor del sospechosismo. Lo que no termina de cuadrar es que sean ellos mismos los que diseñan y llevan a cabo una estrategia en contra de una autoridad electoral o que nosotros, como ciudadanos, permitamos la permanencia de partidos claramente antidemocráticos y rapaces que buscan, a cualquier costo, terminar con la democracia interna desde hoy para permitir el paso a una nueva forma tiránica del poder por el poder. Porque, en resumen, lo que origina la propuesta es el doble discurso de una izquierda que ni se asume oposición responsable, ni se asume poder democrático, ni se asume partido consolidado. Mientras con una mano alimentan al bichito tropicoso, con la otra le jalan el gallo para que se esté quieto y en paz. La izquierda en México sólo puede definirse por un partido que le roba al pueblo para mantener un grupo subversivo e ilegal, mientras las dos mini sucursales se limitan a acariciar sus dádivas legislativas. Y mientras eso sucede, el carnalito aspiracional mira a la gente con cara de urnas presidenciales mientras les canta al son del merengue “¿Quién pompó? ¿Quién pompó su hielito y sus playitas? ¿Quién pompó?”.
Saludos,
D

1 comentario:

Anónimo dijo...

MUY EXCELENTE TU OPINION CARLOS DRAGONNE.
LA IZQUIERDA SON UNA BOLA DE TITERES EN MEXICO AL SERVICIO DEL GRAN AMO Y CAPO DE LA MAFIA MEXICANA.....ESE GRAN AMO ES EL PELON OREJON CARLOS SALINAS DE GORTARI HIJO DE SATANAS...